viernes, 3 de enero de 2014

A los inspectores de la Oficina Antifraude de la UE ( OLAF) les tendremos que explicar por qué la imputada Magdalena Álvarez nos debe prestar 60 millones del Banco Europeo de Inversiones para acabar un Metro con un sobrecoste de 300 millones

Las obras públicas han sido durante décadas el Cortijo deonde robaban a manos llenas las grandes adjudicatarias de este país, FCC, ACS, Sacyr, SANDO etc. 

SANDO no concurre a una obra en la que su presupuesto no deba incrementarse, debido a "circunstancias sobrevenidas" Por ejemplo, el Metro de Málaga, encabezada por FCC y participada por SANDO nos ha costado el doble de lo presupuestado. Por ahora.

Lamento decir, que en este punto, la Unión Europea tiene razón. Los españoles no podemo sconsentir que nos roben a manos llenas, y que encima les riamos las gracias.

Hemos pedido un crédito al Banco Europeo de Inversiones de 60 millones para terminar las obras del Metro de Málaga, que cuestan el doble de lo presupuestado, y son acometidas, entre otros, por José Luis Sanchez Domínguez, empresario imputado por ser el prinicpal sobronante del Partido Popular, por trampear el concruso de MercaSevilla ( el caso que dió origen a los EREs) y por casusar un agujero de más de 8 millones en el Puerto de Málaga.



Cuando vengan los inspectores de la Unidad anti fraude de la Unión Europea ( OLAF) dentro de un par de semanas les tendremos que convencer que los 60 millones no son para tapar el sobre coste que financia a nuestros partidos políticos y sindicatos. Ya verás como algún idiota me dice que ponemos en peligro Metro de Málaga, cuando lo que ponemos en peligro es su corrupción, lacra que ha hundido a este país mientras ellos nadan en la abundancia.

En cuanto los inspectores sepan que es la imputada Magdalena Alvarez la que concede el préstamo a su querido amigo SANDO (incluso le organizó la fiesta de despedida, en una suntuosa fiesta en El Limonar) seguro que se quedan más "tranquilos"....

En España hemos alcanzado unas otas de corrupción tan eficientes, que incluso la exportamos. Que pregunten en Pananá.

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