sábado, 21 de diciembre de 2013

El director de Cáritas Sanlúcar y su esposa, concejal del PP robaron comida de los bancos de alimentos para dársela al partido.

El Banco de Alimentos Solidarios preparó un envase especial de zumos a punto de caducar para repartidos en residencias, albergues, parroquias a familias pobres. Sin embargo, estos zumos fueron servidos al desayuno o informativo que ofrecía el PP, en presencia de la esposa del responsable de Cáritas de distribuir estos alimentos. 

No es que sea grave, es un delito de corrupción en el ámbito privado (los bancos de alimentos no son públicos) puesto que esos alimentos se han malversado, dedicándolo a agasajar periodistas, en lugar de saciar el hambre del hambriento. Cuando yo he visto acciones parecidas (no tan graves) las he denunciado, lo que me ha costado incluso agresiones físicas. En todas partes puede aparecer un indeseable, la diferencia es como se reacciona ante la miseria.

Quitar el pan al hambriento. No se me ocurre acto más miserables por parte de un político que asegura trabajar por el bien común. ¿ Qué hacen al respecto ? Calificarlo como "error lamentable". Robar al hambriento ( aunque sea unos zumos, lo que temo es lo que no sabemos) no es un error, es un crimen. Y debe haber responsables. Si no actúa el PP de Sanlúicar y Cáritas,  le toca actuar al PP de Cádiz o la la Iglesia Católica. Si miran hacía otro lado, habrá que preguntar al PP de Andalucía y al cardenal Amigo, por qué mantiene a ladrones de alimentos destinados a los pobres en cargos de responsabilidad.

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