Cuando la Justicia se convierte en verdugo de una sociedad injusta

Anoche me pidieron mi ayuda. Lo contaré tal cual, con todo su crudeza. Una prostituta de origen chino, que llamaremos Olga había sido, presuntamente, maltratada por el "chulo" (hipócritamente conocido como "proxeneta"). La realidad era bien diferente. El agresor era su novio, quien había discutido con ella. Los vecinos aprovecharon la discusión para llamar a la policía y así librarse de un piso, que ciertamente nadie quiere tener como vecino.

Detenido el chaval, que llamaremos Roberto, comenzaron dos procedimientos, el primero para comprobar si  Olga  había sufrido violencia y el segundo para su expulsarlo de España, aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid. Paradójicamente, la expulsión de su novio dejaría a Olga sola e indefensa ante las mafias chinas que le acechan.

A primera hora de la mañana, el procedimiento por violencia contra Roberto se archiva. Había sido una simple discusión sin mayores consecuencias. Sin embargo Roberto no sale en libertad, es conducido ante otro juez que ordena su internamiento y expulsión de España, dejando a Olga sola y desamparada. Llorando me dice que prefiere ir a la cárcel que volver a su prisión de luces de neón.

De nada sirve hablar con fiscal y juez. Hacerles ver que la expulsión de Roberto conlleva la condena de Olga. Cuando la víctima es una prostituta, todo el mundo mira hacía otro lado, de una forma miserable e inmisericorde.

Derrumbada y abatida, Olga suplica al juez poder despedirse de su novio antes de que lo expulsen, o al menos que alguien le pueda llevar ropa para el viaje. Ni siquiera los dejan decirse un “hasta nunca”. Así de inhumanos son estos procedimientos.

Olga esta desesperada porque ahora tiene un peligro de muerte, amenazada por las mafias de explotacion sexual. Esclavizada, sola, desesperada. La Justicia no le ayuda. La policia no le ayuda. Alguien tiene que ayudarle. Pero esta sociedad no parece preocuparse de  los mas debiles. La obligacion de todo ser humano es defender a sus semejantes. Pero no lo hacemos Espero que tengan su conciencia tranquila