La actualidad política andaluza viene marcada por el congreso del PSOE. Lo único positivo del mismo, fue que lo retransmitieron en directo por Internet porque el PSOE se ha dado cuenta del poder de la red.
Por lo demás, casi todo previsible. Griñan quien aseguraba al tomar la presidencia de la Junta que no perdería la amistad con Pizarro y Chavez, se ha despegado de ambos, como si de un transbordador espacial se tratara. Ya no necesita los cohetes propulsores, pues al océano con ellos.
Griñan sabe que tiene por delante una difícil tarea, y a puesto toda la carne en el asador. Tres eran los requisitos para configurar la nueva ejecutiva.
El primero, si pretendes presentarse como valedor del cambio, lo tiene que hacer con caras nuevas. Así mata dos pájaros de un tiro, y se carga de un plumazo a los Caciquesaurios políticos cuya única preocupación es saber cuanto trincan y donde lo cobran. Igual les da en la Administración que en la empresa pública, en España o en el extranjero, en euros o en francos suizos.
Segundo requisito para poder representar el cambio: se debe ser joven ( a excepción del candidato a Presidente, por supuesto, que para algo el es el jefe)
El tercero, dedicación exclusiva. Nada de compaginar incontables cargos ( a propósito, con incontables sueldos). La tarea se antojo tan complicada, que si desean tener alguna posibilidad, al menos deben poner todo su empeño. Esto desbanco al representante de Cádiz, Francisco González Cabaña que debía abandonar la Alcaldía de Benalup, la Secretaría general del PSOE de Cádiz y la Presidencia de la Diputación gaditana. Demasiada renuncia, para una más que probable derrota. La otrora todo poderosa Cádiz se queda sin represntación en beneficio de Málaga que con Francisco Conejo en Comunicación, Susana Radío en Bienestar Social y Rosa Torres en la presidencia ganan muchos enteros.
Buenos chicos. Jóvenes y seguro que cargados de inexperiencia y buenas intenciones. Conforme vayan adquiriendo la primera, irán perdiendo la segunda.Pero, como tiempo tendremos de examinar la labor de este grupo de Jóvenes aunque sobradamente colocados, así que deleitémonos con las perlas que dejó Felipe González.
En primer lugar, por qué aparece González. Ya sabemos que el caché de presidente para congresos y entrevistas es muy elevado. Y a estas alturas, González no da ni la hora sin poner la mano. Sencillo, hace escasas semanas nombraron a su cuñado Administrador de Invertia, sociedad de capital riesgo que invierte en proyectos con un alto contenido tecnolgico, con dinero público, por cierto.
En segundo lugar, resulta insultante como González ningunea a todo el mundo que le pongan por delante, sea el sindicalista Mendez, o el prescíndete Zapatero. Él está por encima del bien y del mal.
Según aseguró González "No soy multimillonario, ni siquiera millonario… Tengo 68 años y todavía no he decidido ser millonario, pero si lo decido, a lo mejor lo soy". Muy sencillo, Sr. González, no hace falta que el dinero esté a su nombre, para eso están los familiares y testaferros.
Como ya dice lo que piensa, coincido en su análisis de la crisis cuando diagnostica que antes de salir de la crisis estamos incubando la siguiente", y situó a la banca al nivel de un "casino financiero global sin reglas reprochando que oferten productos repugnantes y a la vez recorten el crédito disponible porque se dedican a comprar deuda pública que les renta a 4 % con crédito del BCE al 1 % y así trincan de forma segura el 3%. Eso lo sabe hacer hasta Zapatero.
A ver Sr. González, por qué compran deuda pública. En primer lugar, porque la emiten, y los bancos prefieren ganar de forma segura un 4% a de forma incierta un 5%. Y en segundo lugar, porque el gobierno les obliga, sobre todo a las Cajas, suyos consejos están parasitados por los políticos que emiten la deuda, y luego se la comprar a si mismos con el ahorro de los ciudadanos, negando el crédito a los empresarios que son los que generan empleo y riqueza.
¿ Cómo parar este círculo vicioso? Sencillo, reduzcan el déficit, echen a la mitad de los empleados. Supriman subsidios a los amigos, reduzcan el tamaño del Estado, convertido en Leviatán
Me resulta odioso que nos den monsergas y lecciones de cómo salir de la crisis los culpables de la misma. González se fue del Gobierno con casi el 80 % de deuda pública sobre la riqueza nacional. Aznar la dejó en apenas el 20%, y en el 80% se la encontrará Rajoy y Arenas, empeñados en heredar las ruinas, en lugar de arremangarse y quitarnos a estos personajes de encima cuanto antes.
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