sábado, 29 de diciembre de 2007

UN MUNDO FELIZ


Un reciente estudio de la Universidad de Medicina de Bagdad cifra en más de 700.000 los Irakies fallecidos durante la última guerra, que tristemente continúa. No es, desgraciadamente ninguna sorpresa. Hemos perdido la sensibilidad de sufrir ante estos hecho. Nos hemos deshumanizado. ¿Puede ser éste un mundo feliz?
En mi opinión, no.
Son muchos los estudios que se han hecho sobre el nivel de felicidad de la gente en distintos países. La mayoría de estos estudios son inútiles porque no hacen feliz a nadie, excepto al que los cobra, muy bien, por cierto.
No obstante, leí un artículo de un prestigioso catedrático que mantenía la tesis más que interesante:
“Hasta hace pocas décadas no existían diferencias significativas en el nivel de felicidad entre los distintos países del mundo, sin embargo, las diferencias del nivel de felicidad entre países ricos y países pobres ha aumentado exponencialmente en los últimos años”
El motivo de de la diferencia se debía a que la infelicidad había crecido exponencialmente en determinadas partes del planeta, hasta límites inhumanos.
Sin embargo, en estos lugares históricamente siempre habían sufrido guerras, hambre e injusticia, y nunca habían mostrado niveles tan altos de infelicidad
¿A que se debe el aumento de la infelicidad?
Se debe al conocimiento de quien padece la injusticia, el hambre o la guerra de que un mundo feliz es posible. Y lo conocen a través de los medios de comunicación en un mundo globalizado. Los medios de comunicación como la Televisión o Internet han hecho mucho en globalizar la información y también la frustración.
Nos enseña este estudio que nuestro nivel de felicidad lo percibimos según dos coordenadas: cómo estamos nosotros y como están los que nos rodean, que en un mundo global, son cada vez más.
Guerras, hambre, destrucción muerte. ¿Qué mundo estamos haciendo?
Entonces me doy cuenta que el mundo, es tal y como lo hacemos todos. Pongámonos pues, manos a la obra.

1 comentario:

SmiLe LiFe dijo...

Pensando mucho en este tema, miro a mi alrededor y es dificil no ver infelicidad, muchas personas son infelices por uno u otro motivo, pero ¿es posible alcanzar la felicidad plena? En un mundo donde el odio, la guerra, la envidia, el stress, la avaricia, las apariencias, los prejuicios, lo inunda todo, sin dejar que veamos esas pequeñas cosas, que son las que verdaderamente merecen la pena, no nos damos cuenta que sólo contamos con una vida y que esta va corriendo sin esperar a que tomemos una decisión, la decisión de elegir lo que verdaderamente nos hace feliz en la vida, quitandonos de encima los prejuicios, las apariencias y teniendo el valor de hacer las cosas que siempre hemos querido, empezando vivir nuestros sueños, en vez de soñar nuestra vida.
En mi opinión, los niños son los únicos que pueden alcanzar la felicidad plena, por su bendita ignorancia acerca del mundo que les rodea, metidos en su burbujita de felicidad, hasta que crecen...
Decía Aristóteles que la vida del ser humano era una constante búsqueda de la felicidad, y eso es lo que explicaba nuestro comportamiento. En fin, hagámoslo, busquemos la felicidad, pero no en grandes cosas, empecemos desde la pequeñas.

Difusión Twitter